Adrián Sallo Sallo, tal como señala con acierto el título de esta nota, es un impulsor de los Biohuertos Educativos de Econtinuidad desde la primera hora. Es decir, desde el mes de julio del algo lejano año 2000.
Adrián llegó a la vida de Econtinuidad en los albores de nuestra organización, en el momento que nuestra organización bregaba por delimitar el campo de su acción en ese gran espacio en el que confluyen la ecología y la educación.
Fue a través de una persona, a quien Francisco Huanacune, fundador de Econtinuidad junto con Sophie Dmitrieff, su esposa, había acordado una reunión, a la que dicha persona nunca llegó.
No llegó, pero por conversación telefónica, dicha persona le sugirió a Francisco Huanacune ver al “joven y talentoso”, tal como señaló, Adrián Sallo Sallo. “Un joven cusqueño con ganas de salir adelante junto con los miembros de la comunidad Fortaleza Salkantay”.
“Usted verá Francisco, añadió esta persona, lo único que puedo decir es que Adrián Sallo corresponde al tipo de personas que ustedes están buscando para aportar algo en los campos de la ecología y la educación”.
En uno de los restaurantes que no faltaban por ese entonces en los costados de la Plaza Mayor del Cusco se llevó a cabo la reunión entre Francisco Huanacune y Adrián Sallo Sallo. El primero de muchos, pero muchos, encuentros.
Adrián, con el paso del tiempo, conoció a los demás miembros del equipo de Econtinuidad. A Sophie Dmitrieff, a Patricia Ávila, a Liliam Morante Torres. Años después haría lo mismo con Rosaura Huanacune y Héctor Yarasca.
Este hombre comprometido con la ecología y la educación, lo mismo que con el destino de su pueblo, jamás ha desmentido las expectativas que desde un inicio Econtinuidad depositó en su persona.
Podríamos decir que los caminos, en muchos de Econtinuidad en el Cusco y el de Adrián Sallo Sallo, quien está en vías de graduarse como profesor de Educación Bilingüe Intercultural (EBI) de nivel primaria, van unidos.
Adrián ha desempeñado las labores de asesoría técnica para los Biohuertos Educativos en el Cusco durante varios años (2003-2008), así como ha participado en la construcción de un buen número de Biohuertos Educativos tipo invernadero. Algo que hace hasta el momento.
Este dirigente cusqueño ha participado asimismo en un buen número de los dos tipos de talleres que lleva a cabo Econtinuidad: los Técnicos y Pedagógicos, y los Escuela-Comunidad.
Hoy Adrián Sallo Sallo es un hombre casado y un responsable padre de cuatro hijos. Un hombre pues de bien, al servicio de su familia, su pueblo y de la tierra que ama profundamente.
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