Las hortalizas cultivadas en el Biohuerto Educativo de este plantel ubicado en el distrito de Maras (Urubamba, Cusco) son incorporadas en los alimentos degustados, a la hora del almuerzo, en el comedor de la escuela.
La mañana del miércoles 16 de octubre, los miembros del equipo de Econtinuidad fueron testigos de cómo las hortalizas cultivadas en el Biohuerto Educativo de la IE de Anccoto fueron incorporadas en los alimentos preparados en la amplia cocina de este plantel localizado a pocos kilometros de las mundialmente célebres salineras de Maras.
Los alimentos preparados aquella mañana por un grupo de madres y padres de familia fueron compartidos en medio de un ambiente signado por la camaradería asimismo por Sophie Dmitrieff y Francisco Huanacune, fundadores de Econtinuidad, y por los amigos franceses de nuestra asociación que ese día se dieron cita.
«Es alentador ver cómo el Biohuerto Educativo se proyecta, además del aula escolar, a otros lugares de la escuela como son la cocina y el comedor, en este caso de la Institución Educativa de Anccoto, enriqueciendo con sus enzimas, minerales, vitaminas, oligoelementos y otros micronutrientes la alimentación que aquí se comparte», dijo Sophie Dmitrieff.
Lo sucedido la mañana de mediados de octubre de 2019 es una prueba fehaciente de que el Biohuerto Educativo «biohuertiza», incorporando las hortalizas, las cocinas y los comedores de los centros escolares que cuentan con estos ámbitos para proveer con alimentos a los miembros de la comunidad educativa (dirección, profesores, personal administrativo, padres de familia y alumnos).
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